miércoles, 11 de enero de 2012

Un dia cualquiera

Solo era cualquier dia; asomaba la noche;
afuera llovia; adentro no tanto; El queria salir de esta sucia pencion;
pero la puerta no queria participar en el cuento;
 por lo tanto el escritor solo podia narrar una historia de pencion;
asi que decidi quedarme en el sucucho;
tenia yerba para unos mates;
algunos hongos en la heladera;
nada en los cajones de los placares;
la billetera tenia algo de dinero;
pero ni la puerta, ni el escritor, ni la ventana, dejarian que los gastara;
la puerta se me reia;
el escritor no lo se;
y la ventana me mostraba los 33 pisos que podria saltar;
pero la tinta seguramente lo impidiria;
sobre la mesa, el unico libro de la ciudad  "el castillo" y una radio con una sola fm;
un rompecabezas para mayores de 81 años;
despues de leer bastante y siempre hasta la misma pagina; lo dejo;
no se si por aburrimiento,
por no entenderlo o porque el personaje queria entrar a toda costa al castillo,
y yo simplemente salir;
y la puerta que no queria ser puerta;
la lapicera se encargaba de poner comida en la heladera,
de lavar la ropa y poner mas dinero en la billetera;
siempre aqui ; en esta pencion;
jamas me hecharian ;
o un cemaforo;
un parque    ;
un bar;
pues el escritor se aseguraria de tener todo bajo control;
me quedo aqui;
en esta pencion, que es como un castillo para mi;
sin noticias  y sin saber, que va a suceder;
si debo tocar el picaporte;
abrir la ventana;
agarrar el martillo;
hablar con el escritor;
o dejar el lapiz;
busque volverme loco;
deje el libro, encontre televisor prendido;
busque martillo;
encontre ciudad a oscuras;
busque velas, fosforos mojados;
busque llave de la puerta, encontre golpe en la cabeza; desmayo;
ciudad brillando, exterior, cemaforo amarillo;
un perro movia la cola , un niño que sonreia;
busque saber la hora, encontre relojeria;
el bar de al lado; y un kiosco para comprar el diario;
y buscar trabajo;
vasos y basos de yak dhaniels;
busque pagar la cuenta, billetera vacia;
el mozo corriendo; un golpe;
pencion;
la puerta cerrada;
la llave perdida;
el libro en la misma pagina;
amaña quizas buscar trabajo;
otra casa;
y otra llave;
y quizas encontrar, un bar, una mujer;
un trago, un hotel;
u otra pencion.

Influencia de perros.

Perros, tan parecidos a la gente; todo el dia oliendose el culo;
algunos peones que le huelen el culo al capataz, este al jefe de seccion;
el jefe al gerente, el gerente a los accionistas, estos a sus socios;
a los gobernantes  y asi hasta la suegra o la amante;
una gran olida de culos empresariales, familiares, militares;
llegando a la iglesia al pentagono;
que se huelen el culo entre ellos;
cuestion de  bombachas y calzoncillos,
 viagra y  botones nucleares;
aunque los perros sean menos discretos;
aun no saben de su influencia.